«Si me dieras un minuto en tu barriga, no te pido nada más.
Pero dámelo antes de que sea de día».
Te doy media noche. Andrés Suárez
Beneficio de la duda
Otra oportunidad,
un café, una cerveza,
un paseo lento al atardecer
o toda una noche en vela.
Lo que tú quieras.
Dame unas horas, unos meses
o la vida entera.
Pero concédeme la duda.
A veces hace falta un segundo baile,
probar con otro perfume,
empezar con el desayuno.
Dame otra oportunidad.
Puede ser más desastrosa,
más loca o más cabal.
Pero como no hay dos sin tres
y a la tercera va la vencida,
no sería la última
y yo sería la primera.